Los Estados Unidos Mexicanos: país de cincuentones
Sabemos que la educación anda mal... y qué lástima que sean necesarios los análisis y estadísticas internacionales para poner en su lugar a ciertos funcionarios de gobierno. Porque los análisis y estadísticas oficiales nos dicen día con día que 'vamos progresando'... y nos conformamos con poco más que eso.
No me parece que haber puesto a México en el lugar cuarentaytantos de cincuentaytantos tenga un trasfondo de mala fé. ¿A quién puede importarle internacionalmente cómo anda la educación por acá...?
Si alguien tiene acceso a la educación en Norteamérica, Europa o la parte este de Asia, no tendrá interés en venir a estudiar para acá... a no ser que precisamente se dedique a la sociología y llegue mirándonos como objetos de estudio.
Simitrio lo mencionó magníficamente: la escuela dá sólo conocimiento. Datos, fórmulas, fechas, lugares. La verdadera educación, esto es, la educación entendida como formación, comienza en casa. Y la generación posterior al 68, que creció sin compromisos sociales, atada a ninguna tradición y sin ser capaz de subvertir el orden establecido, poco puede ofrecer a la generación que actualmente tiene que hacer frente a un país casi a punto de desmoronarse.
De allí que la oferta y la demanda de universidades públicas sea solamente de mano de obra calificada. Técnicos universitarios superiores. Mano de obra que, según los tabuladores internacionales, resulta baratísimo importar y explotar.
Podemos llegar al lugar 60 de 60. No serán los estudiantes quienes tomen conciencia de la gravedad de esto. Vivimos en un país donde los tuertos fingen guiar a los ciegos. Y los tuertos realmente están peleándose por llegar al trono en esta Monarchia Mexicana.
Sí, los ciegos pueden irse a la mierda.
No me parece que haber puesto a México en el lugar cuarentaytantos de cincuentaytantos tenga un trasfondo de mala fé. ¿A quién puede importarle internacionalmente cómo anda la educación por acá...?
Si alguien tiene acceso a la educación en Norteamérica, Europa o la parte este de Asia, no tendrá interés en venir a estudiar para acá... a no ser que precisamente se dedique a la sociología y llegue mirándonos como objetos de estudio.
Simitrio lo mencionó magníficamente: la escuela dá sólo conocimiento. Datos, fórmulas, fechas, lugares. La verdadera educación, esto es, la educación entendida como formación, comienza en casa. Y la generación posterior al 68, que creció sin compromisos sociales, atada a ninguna tradición y sin ser capaz de subvertir el orden establecido, poco puede ofrecer a la generación que actualmente tiene que hacer frente a un país casi a punto de desmoronarse.
De allí que la oferta y la demanda de universidades públicas sea solamente de mano de obra calificada. Técnicos universitarios superiores. Mano de obra que, según los tabuladores internacionales, resulta baratísimo importar y explotar.
Podemos llegar al lugar 60 de 60. No serán los estudiantes quienes tomen conciencia de la gravedad de esto. Vivimos en un país donde los tuertos fingen guiar a los ciegos. Y los tuertos realmente están peleándose por llegar al trono en esta Monarchia Mexicana.
Sí, los ciegos pueden irse a la mierda.
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