Un poema - no se siente el morir, de Simitrio Quezada

no se siente el morir


no se siente el morir
muero conmigo
muere mi vida recién inaugurada
muere mi frío, mi adiós, mi desvarío
muere mi muerte, un poco asesinada
no se siente el morir
morir es poco
es sólo un pasatiempo de aburridos y de locos
se muere en ratos, se muere con zapatos
que cuelgan de las piernas de un suspiro
no se siente el morir
morir nos cansa
no se siente el morir cuando se masca
el hilo del dolor, el hilo flojo
no se siente el saber que estoy tan solo
no se siente el morir
si ya estás muerto
no se siente el sentir del desacierto
no se siente la cruz de esta mi tumba
adornada de ansias insepultas
no se siente el morir en días nublados
no se siente la muerte del pasado
ni la muda sonrisa del recuerdo
si en las sombras se apaga el desconsuelo
no se siente el morir ni el abandono
no se siente el penar de paz sin tronco
no se siente la angustia derretida
no se siente la muerte, ni la vida...

Simitrio Quezada, en 'Liturgia para ateos creyentes', Vísperas.

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