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Como no es tiempo de posts bien acá, o de publicar cosas de esas dizque trascendentales, quemaré este cartucho nomás para decirles que no estoy muerto ni ando de parranda.

Sender: No te agrego al féis, porque sé que eres más largo que la cuaresma. Tengo una cuenta para la familia -a donde me enviaste la solicitud, y en la que sólo el Sr. Olague y Ana tienen cabida- y otra para mis 'public affairs'. Si te agrego en cualquiera de las dos sé que nos iremos a las trompadas más pronto que antes de que te des cuenta, así que, saca tus conclusiones. Yo tampoco soy un robot.

Ana: qué decir, sólo que no me he dado el tiempo para comentar tres o cuatro cosas -y ni siquiera para terminar el cuentecillo que le comenté hace un par de meses, que se quedó en la primera cuartilla y de allí no quiere pasar-. Lo único, que algo me dice casi con certeza, que usted anda metida en algo más tenebroso. Quizá está escribiendo una novela?

Olague: No comenté nada cuando te vi como gnomo girando alrededor de los hongos mágicos, nomás porque sí, ver a los Parsons así de cerquitas es algo que vale la pena y no puede contarse sin dar vueltas como gnomo alrededor de los hongos mágicos.

Xhabyra: tengo frito el cerebro por tanto ver la telera sin condón. Por eso me infecté de cuanta pendejada dicen los televisos, y a pesar de que los odio, los quiero tanto a los méndigos que no se imagina lo bien que me la paso viendo telenovelas que no se creen ni ellos mismos.

Bien, como creo que no dejo pendientes, me largo a seguir con esta vida de jodido tercermundista que me ha tocado vivir.

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Nam stat fua cuiq~ dies, breue et irreparabile tempus.