El lenguaje es humano. Los meta-lenguajes, no.

Estimado Señor Lingüista: pase de largo, esto no va para usted.

Hablaré, así de pasada, de algunos contenidos multimedia que abordan el problema del lenguaje desde diferentes puntos de vista. Esto, porque en este presente -del trece de abril de 2024, especificando- están transmitiéndose por lo menos 3 o 4 series que tratan, directa o indirectamente, de los lenguajes eminentemente humanos y una posible y poco probable capacidad de traspasar esos lenguajes y entablar comunicaciones con otras entidades, que pueden ir desde lo micro hasta lo macro.

Tenemos el caso de 'El problema de los tres cuerpos', en su versión novelada y seriada, donde, al entablar contacto con una civilización extraterrestre, queda también de manifiesto la gran distancia que media entre un lenguaje quiérase que no, limitado y delimitado por el espacio-tiempo y un lenguaje que no está atado a esas dimensiones y puede ser, en sí mismo, un sustrato real con fundamento también en una de esas dimensiones que nosotros, en este momento, no estamos capacitados para 'desplegar'.

En el campo del cine, Godzilla X Kong hace lo suyo, con un lenguaje de señas que, tentativamente, debería bastar para entablar comunicación con ese ser gigante y de fuerza descomunal que estaría incapacitado para comprender o entender a quienes, desde su perspectiva, serían meras hormigas, insectos o bichos que pueden ser aplastados con el pie sin dejar apenas una huella minúscula sobre el piso.

En su momento, 'Arrival' jugó con un lenguaje que era también una cosmovisión y una cosmología entera, un lenguaje capaz de transmitir de forma inmediata conceptos, fórmulas y estructuras complejas y también una herramienta que va más allá de la temporalidad humana, fungiendo en el filme como un lente de visión remota que permite asistir a episodios que se desarrollarán en un futuro y en un pasado remotos.

A pesar de ello, pocos filmes tan complejos en su simplicidad como 'Pontypool'. donde se sopesa la posibilidad de que una raza alienígena sea capaz de 'infectar' con un virus no una célula, no un organismo vivo, no una estructura microscópica bacteriana o una comunidad de seres humanos, sino una palabra. No el lenguaje, el vocabulario total de una lengua, sino una sola y única palabra.

Todas estas situaciones -al igual que la retratada en 'Extrapolations', de la que hablaré a continuación- tratan de vislumbrar un escenario donde sería posible alcanzar otros niveles o formas de comunicación, que sean independientes tanto de un contexto como de una realidad 'concreta' determinada.

Esta serie fue transmitida en 2023, y en sus primeros episodios aborda la posibilidad de entablar comunicación con una ballena, utilizando codificadores-decodificacores y resguardando esa información con una finalidad específica: hacerse con las patentes de dichos estudios y grabaciones y los resultados que puedan brotar o surgir de ello, y resguardar para 'un futuro' donde sea posible hacer limpieza y quizás restaurar el planeta, para 'revivir' o 'resucitar' especímenes que ya se han extinguido.

Esa ballena es la última en la tierra, y un corporativo que es como todos los corporativos que infectan actualmente este mísero mundo, trata de exprimir hasta el último minuto esa relación con miras a obtener datos antes de enviar a la ballena directo a la muerte, en busca de un compañero que no existe y se ha 'fabricado' echando mano de grabaciones viejas, de otro espécimen ya muerto.

Cuando la investigadora, responsable de entablar comunicación con esa ballena solitaria y al borde de la extinción, se ve obligada moralmente a hacer lo posible para que la interlocutora no muera encallada, en una muerte que sería inhumanamente cruel pues pasaría los últimos momentos pensando y esperando a un compañero que no llegará jamás, e intenta explicarle que lo que escuchó no es la voz viva de un macho que busca aparearse sino una grabación vieja, una grabación con la voz de alguien que ya ha muerto, se topa con la barrera de lo cotidiano, de aquello para lo que no existe la posibilidad de dotar con un significado, referente, signo o símbolo o lo que sea.

¿Cómo podría explicarse a una ballena qué cosa es una 'grabación'?

Y, visto en perspectiva, ¿qué conceptos, cuáles otras realidades, qué otras formas de existir y de vivir podrán servir de marco para la vida o existencia de una raza alienígena que sobrepase la prisión de estas tres dimensiones, y que nosotros estaríamos, irremediablemente, incapacitados para entender, comprender o aprehender?

Lo formidable de esto, el pequeño milagro, es que seguimos confiando tanto en el lenguaje como arma y herramienta, que pensamos nos podría ayudar a llevar la comunicación mucho más allá de los límites meramente humanos.

Y eso lo vemos todos los días, hay quienes creen que una oración puede hacer que las entidades angélicas cumplan caprichos mezquinamente humanos, como sacarse la lotería. Y hay quienes piensan que, también, enunciando el nombre secreto de Dios podrían hacer que Dios deviniese en un mero sirviente. A tanto llega nuestra confianza ciega en el propio valor, y nuestra desmesurada arrogancia.

1778.
Nam stat fua cuiq~ dies, breue et irreparabile tempus.